Capítulo 38.
-Te veo mañana. - Dijo Gail pasando por mi lado.
Le habían asignado una misión en la que era muy probable que no regresara por la noche. Y eso me lo dijo en cuanto nos despertamos, así que no era una sorpresa su partida.
No pregunté y él no me dió detalles sobre lo que iba a hacer pero estaba segura de que me contaría todo cuando regresara.
Tenía mucha suerte. Él no tendría entrenamiento extra después de todo el ejercicio de hoy.
Le di un saludo o algo así. Me dolía todo y actualmente me encontraba tirada tal cual la posición de mi última abdominal.
-Vomi. - Dijo Rep apareciendo en mi campo de visión.
-Piedad. - Murmuré cerrando los ojos.
-No hay piedad para los débiles. - Dijo con un bufido. - Arriba, debes completar tu otro entrenamiento y luego te enseñaré a cazar.
Suponía que el Alfa Supremo estaba demasiado ocupado como para enseñarme él. Lo comprendía, pero era una lástima.
Gemí e intenté levantarme con todas mis fuerzas... sin éxito. No podía más.
Escuché a Rep