11. El Ratón Travieso
La pelea fue ganada por Sean y sus compañeros, sin duda. Rescataron a los cuatro niños pequeños que habían sido secuestrados y cuyas vísceras iban a ser vendidas en el extranjero.
Sean ya estaba acostumbrado a frustrar este tipo de problemas, a veces se arrepentían de no poder rescatar a los niños que ya habían sido vendidos.
"Dile a Remon que si quiere órganos internos de niños pequeños, que se case pronto y tenga hijos, y que venda a sus propios hijos. Que no sean los hijos de otros los que se conviertan en víctimas". Dijo Sean con el rostro frío.
Dor... dor... dor....
Tres disparos volvieron a golpear las tres piernas de los secuestradores. Sean lo hizo deliberadamente como advertencia para todos.
Entonces, llevaron a los cuatro niños para entregarlos a la policía que había estado colaborando con Sean en secreto.
A las cuatro de la mañana llegaron a la comisaría, Sean salió inmediatamente del coche y se dirigió a su moto.
"James, tú te encargas del resto". Dijo Sean mientras se pon