POV Elara

El rumor sobre el accidente del príncipe de Valdenor se extendió por todo el castillo antes del anochecer. Para la mañana siguiente, ya todos sabían que el huésped había sido herido —aunque fuera apenas un rasguño, pero supongo que la carne de realeza es más delicada.

Lady Mirenia, siempre deseosa de estar cerca de la novedad, no tardó en proponer que lo visitáramos.

—Un gesto de cortesía —dijo mientras ajustaba los lazos de su vestido frente al espejo—. Además, el pobre hombre debe sentirse terriblemente solo, lejos de su tierra y con una herida.

La observé en silencio, fingiendo arreglar el velo que cubría mis hombros.

No estaba segura de que la visita fuera una buena idea. Había visto el rostro del príncipe Leonard cuando abandonó la plaza después del duelo; aquella mezcla de incomodidad y rabia contenida me bastó para entender que el accidente no había sido del todo inocente.

—¿Crees que fue intencional?

—No, claro que no. Nuestro heredero sería incapaz de algo así.

No s