— Te lo agradezco Lía.
— No tienes nada que agradecer, me estas dejando mucho dinero y pues tomo eso en cuenta — me dijo — contactare con el señor Lund para avisarle que ya te encuentras lista.
— Muy bien — le dije ansiosa y cruzando las manos.
— Te necesito poner una inyección — me dijo — es para evitar que salgas embarazada.
— Está bien.
Ella después de llamar por teléfono llegó un doctor que me llevó a inyectarme el anticonceptivo, coloque mi ropa en su lugar y me iba a ir.
— Ese método dura un trimestre para que sepa.
Yo asentí y le agradecí, después me fui a la oficina de Lía en donde hablaba por teléfono.
— Te lo agradezco, ella va a pagar la estancia completa así que no te preocupes.
Le dije que quería la mejor habitación y se lo hizo saber a la persona con la que hablaba, una vez que colgó me ofreció asiento.
— En la salida te van a entregar una lencería, dado que ya estás aquí pues te la adelanto, úsala ese día y trata de aflojarte un poco — me dijo mientras rec