CUANDO FENRIR SE PRESENTA COMO ALFA DOMINANTE, TODOS ESPERAN A VER A QUIÉN ELEGIRÁ COMO SU COMPAÑERA, PERO CUANDO LA MUJER QUE AMA NO SE MANIFIESTA COMO LOBA, FENRIR SE MARCHA JUNTO A ELLA PARA FORMAR UNA MANADA DONDE NAYA NO TENGA QUE ESCUCHAR MALOS COMENTARIOS POR SER UNA INWERE. LO NINGUNO DE ELLOS ESPERÓ, ES QUE LA COMPAÑERA DESTINADA PARA FENRIR APARECIERA. NEGADA A PERDER SU ESTATUS COMO DESTINADA DEL ALFA, ARIADNA ASESINA A NAYA Y VALIÉNDOSE DE SUS PODERES, TORTURA SU ALMA HASTA QUE ESTA LOGRA ESCAPAR Y REENCARNAR. LO QUE NADIE ESPERÓ NUNCA, ES QUE WINTER FIGARLAND CONSERVARA LOS RECUERDOS DE SU VIDA PASADA, Y QUE ESTÉ DESEOSA DE OBTENER VENGANZA DE AQUELLOS QUE LE ARREBATARON TODO.
Ler maisLa habitación se encuentra envuelta en una profunda luz etérea, misma que se mezcla con la suave niebla que cubre cada rincón, dándole al lugar un aspecto más onírico.En el centro de la habitación, un inmenso lobo negro de pelaje brillante se encuentra profundamente dormido. Cada respiración acompasada del animal, resuena con fuerza dentro del espacio, aún en ese estado, desprende un poder que contrasta marcadamente con la armonía de la estancia.Poco después, una nueva presencia emerge desde un rincón de la habitación, la figura se muestra primero envuelta en sombras, luego su esencia se cubre con una luz de un ligero tono azul hasta que finalmente su figura se nota de manera nítida.La figura de la pelinegra da pasos cortos y gráciles mientras se acerca al lobo, su presencia ilumina la habitación cada vez un poco más.Por su parte, Winter se mantiene de pie frente al ventanal desde el cual puede observar un ocaso perpetuo, pero sin dejar de estar atenta a lo que la pelinegra hace.
༺༻ BOSQUE DEL NORTE ༺༻ FRONTERA ESTE ༺༻Para el momento que Ariadna entra en los límites del territorio de la manada, la tarde ya está comenzando a caer sobre el horizonte.Han pasado treinta largos años desde la última vez que se encontró con Bjior, y después de la discusión que tuvieron ese día, este se había negado a verla e incluso había bloqueado su lazo de conexión.Al volver a su forma humana, la loba no puede evitar sentir como su corazón late con fuerza en su pecho, pero sabe que no es solo por la distancia que tuvo que recorrer para llegar hasta allí, no, es algo más; es el temor que siente ante la sensación de ser observada.Sin querer perder más tiempo, camina los pasos que le separan de la entrada a la cabaña donde ahora vive su hermano, levanta la mano con la intención de tocar a la puerta, pero antes de que pueda llamar, esta se abre apenas un poco y acto seguido, puede ver como el rostro familiar de su hermano aparece. La manera en que la mira le deja en claro que y
—Es un placer conocerles— son las primeras palabras que salen de la pelirroja, una vez que se coloca junto a su padre, y observa a los dos alfas—. Espero que su estancia con nosotros sea de su total agrado.Fenrir, en un esfuerzo por ocultar la conmoción que la presencia de Winter produce en su interior, estrecha la mano que ella amablemente le extiende.Sus miradas se encuentran, y por un breve instante y el tiempo parece detenerse a la vez que una fuerte corriente recorre el cuerpo del hombre, mientras, su lobo, anhelante, le suplica tomarla y huir con ella, a donde nadie pueda encontrarles y puedan volver a separarlos.—El placer es mío, señorita Figarlan. — responde, luchando contra los instintos de su lobo interior que ansían acercarse más a ella, hasta que no quede ni una pulgada de espacio entre ellos—. Gracias por recibirnos en su hogar.Desde su posición detrás de Fenrir, Matt se mantiene en silencio mientras observa las reacciones de su mejor amigo, y aunque él también está
—Entonces, ¿es un pacto seguro? — Fenrir deja salir su pregunta mientras mantiene su mirada fija en el camino que conduce al territorio de la manada del alfa Figarland.—No del todo, — Matt también observa el camino mientras su mirada se extiende a lo largo del bosque, todos sus sentidos alertas pues sabe que están dentro del territorio de la manada Silver Moon. Aún cuando no puedan verlos, sí puede oler a los lobos que los vigilan desde la distancia—. Shun está totalmente seguro de firmar el acuerdo entre nuestras manadas, pero el alfa Figarlan sigue mostrando algunas dudas sobre los beneficios de firmar la alianza.Antes de que pueda decir algo en referencia al tema, la presencia de lobos cerrando sus pasos y comenzando a rodearlos mientras se muestran a la defensiva, le deja en claro que han llegado a ese punto dentro del territorio en el cual no podrán avanzar más, o por lo menos, no sin antes declarar las intenciones que los llevan hasta aquel sitio.Aunque una parte de él se sie
Los fuertes gritos de Naya se extienden a lo largo del espacio ocupado por las casas de la manada. Desde comienzo de la madrugada, la pelinegra había comenzado con sus labores de parto y ahora se encuentra en la cabaña que ocupada junto a Fenrir en medio del proceso de traer a su cachorro al mundo.—Solo un poco más Naya, vamos— son las palabras de Kindra, la partera de su antigua manada, misma que fue traída por Fenrir para ayudarla—. Ya viene el cachorro, puja un poco más.Un fuerte grito sigue a esas palabras y luego todo se sumerge en un profundo silencio.Fuera de la cabaña, Fenrir camina de un lado a otro con todas sus emociones a flor de piel. Su lobo se encuentra arañando su interior exigiéndole dejarle salir o hacer algo para ir con su Luna y ayudarla a sobrellevar su dolor.Y es que el hecho de que Naya sea una inwere tiene a todos sumidos en preocupación. Cuando las lobas van a tener a sus cachorros, solo anidan y adoptan su piel de lobo, lo cual no solo las ayuda a sobrell
Por orden de Fenrir, Ariadna y su familia se encuentran ubicados en una de las casas de transición que se encuentran al borde de las del resto de la manada.Sentados junto a ella, su padre y su madre sonríe con malicia mientras buscan una forma en la cual puedan deshacerse de la “Luna” del Alfa, que Ariadna sea la destina de Fenrir es una oportunidad de poder que no pueden ni piensan dejar pasar. —Esto es mejor de lo que podíamos esperar — son las palabras de Gael mientras observa fijamente a su hija—. Si logramos deshacernos de la inwere, y ese asqueroso bastardo que espera, tu camino para unirte al alfa Fenrir estará libre— murmura con una sonrisa astuta.Su esposa, con una mirada afilada, asiente con complicidad, pero no bien así, más racional que su esposo.—Tal vez no sea fácil— asegura mientras recuerda al lobo que llegó junto con Fenrir y Naya, mismo que se puso en un estado de alerta y extrema protección en el momento de Ariadna mencionó la baja casta de la pareja actual del
༻ 3 AÑOS DESPUÉS ༺— ¡Te encontré! — Fenrir sale desde la derecha y grita mientras atrapa fuertemente entre sus brazos la pequeña figura de Naya, misma que solo deja salir un fuerte y sorpresivo grito, para luego abrazarse con fuerza al pelinegro.Para los lobos el salir de cacería es emocionante, más aún si esa acción es realizada al cazar a su pareja. Por esa razón, el lobo de Fenrir se muestra emocionado, después de todo, aun cuando su condición de inwere, evita que Naya no puede cambiar, es muy buena ocultándose, y eso hace que su lobo se sienta igual de emocionado ante idea de encontrarla.Aunque en esos momentos, debe tener mucho cuidado con sus acciones, debido al estado de la pelinegra.—¡Es trampa! — son las palabras de Naya una vez que se separa del abrazo—. Eres más rápido que yo.—Pero tú te ocultas mejor que cualquier lobo.Esas palabras son un simple susurro por parte del chico antes de tomar el rostro de su pareja y fundirse con ella en un suave y largo beso. Para ambos
༻ BOSQUE DE TRILLEMARKA ༺༻ NORUEGA – 1424 ༺Naya solo deja que sus piernas se muevan por instinto propio, en ningún momento se fija hacia qué lugar le dirigen. Tal vez porque está más centrada en el dolor que siente al saber que todo está perdido, o quizás porque intenta borrar la imagen de la confusión en el rostro de Fenrir cuando se volteó hacia ella y olfateó el aire sin encontrar nada, o quizás porque solo quiere encontrar una forma rápida de acabar con todo.Aquel era su final, simplemente la última oportunidad a la que tan fuertemente se había aferrado, se le acaba de escapar de las manos.—¡Naya, basta! — Son las firmes palabras del pelinegro al quedar frente a ella y cerrarle el paso—. ¡Deja de huir de mí!—¡Aléjate! — Exclama entre lágrimas. Dejando que su cuerpo se mueva hacia un nuevo rumbo, o eso intenta, pues Fenrir la sujeta con fuerza—. ¡Suéltame! ¡Déjame ir!—¡Naya, basta! — Fenrir deja salir sus palabras con un tono de súplica.Y aunque es más que seguro que otros d