POV Emily
Sin duda las cosas serían diferentes ahora. Nuestros cuerpos se han conocido, hemos tenido intimidad. Sentía un poco de vergüenza. Cuando el calor del cuerpo se apagó y la sangre se volvió a enfriar, empecé a cuestionar mis actos.
—Dios, ¿Qué hiciste?
Miré mi reflejo en el espejo y veía como mi cara ardía de la vergüenza.
El señor Jones, me ha visto completamente desnuda. Ha tocado mi cuerpo, besado cada rincón de mí.
—¿Estás lista?
Me removí de solo escuchar su voz, tragué sonoramente y no pude responder, estoy apenada, como una tonta.
—¿Emily?
Que me llame por mi nombre se siente extraño.
—Sí, ya estoy lista.
Salí del baño con un vestido que Benjamín ha comprado para mí.
—Te queda bien.
Él sonríe y se acerca, yo bajo mi mirada al sentir que mis mejillas me delataban.
—Sí, me quedó perfecto.
Sonreí, pero sin verlo. Sentí como el levantó mi mentón y me hizo mirarlo a la cara.
—Todo te queda bien.
Mi corazón se acelera por eso que acaba de decir. Dios, ¿Qué es esto?
—Gracias.