Lyra escucho aquellas palabras como si fueran totalmente ajenas a ella. Miles de pensamientos pasaron por su mente, mientras que solo uno de ellos parecía triunfar sobre el resto.
Ella estaba desnuda en su totalidad, solo la débil cortina de la ducha tapaba la visión de Damino. Aquello le parecía demasiado, pero la idea del príncipe cruel era deslizarse junto a ella.
Lyra abrió la boca, preparada para quejarse, gritarle que saliera del cuarto. Si Diana la iba a encontrar y matar aquel dia, al menos quería marcharse de ese mundo con algo de dignidad.
Sin embargo, justo cuando sus labios se separaron, preparados para atacar al hermoso hombre ante ella; este se movio con gran velocidad, deslizándose al interior de la ducha mientras colocaba una mano sobre la boca de ella y la apoyaba de espaldas contra su pecho.
Lyra le mordio los dedos mientras se revolvía rabiosa contra el, intentando liberarse de su agarre.
Damino gruño y juro, sin apartar la mano de sus labios. Aun asi, el se inc