Ryan pensó con rapidez, y observó a los ojos a Vanessa.
—Fue un decir, no imaginé que en verdad te metieras a esas páginas —comunicó con tranquilidad.
Vanessa frunció los labios, la explicación de él, no le sonó convincente, pero no se iban a poner a discutir por eso.
—Lo hice una vez, y ya. —Encogió los hombros—, en fin, enviaré a tirar esas flores.
Ryan observó el arreglo era muy hermoso, y rememoró que con tanto contratiempo no había tenido un detalle con Vanessa, ni siquiera le había dado un anillo de compromiso, se reprochó mentalmente.
—Es solo un arreglo, y es normal que una mujer como tú, tenga admiradores. —Se aproximó a ella, la agarró por la cintura y la pegó a su cuerpo—, pero muy pronto todos esos caballeros sabrán que me perteneces.
Vanessa colocó sus brazos alrededor del cuello de Ryan, lo miró a los ojos.
—No necesitas un papel, yo soy solo tuya —enfatizó con sinceridad, sintiendo como su corazón se agitaba.
—Te amo, tanto —dijo Ryan antes de besarla.
—Y yo a t