Sebastián
—¿Alfa? ¿Alfa?— escucho una voz que me llama y me despierto en la oscuridad del cuarto, mi cara enterrada en el cuello de ella.
—¿David?—
—Disculpa que te moleste Sebastián... pero está sucediendo algo importante y creo que lamentablemente hay que actuar— me dice mi Beta.
—Salgo en