POV Hanna.
Desperté esta mañana y Leonardo ya no estaba, supongo que fué a dar una vuelta por sus negocios. Escucho sonar el teléfono intercomunicador y corro para atender.
- Si buenos días? - digo.
- Buenos días Sra. Angelucci - me gusta como se escucha - Por aquí está el joven primo del sr. Leonardo... Adán - me dice el vigilante.
- Ah si? Permítele la entrada! - le ordeno y salgo corriendo a la habitación a cambiarme de ropa por una más presentable.
*Ding Dong*
Suena el timbre y me apuro para abrir la puerta.
- Adán! Que sorpresa! - le saludo con un beso en la mejilla.
- Si, estoy tratando de comunicarme con Leo pero no me atiende y me dió pena llamarte - dice apenado.
- Ah no que no te de pena llamarme! Bueno, Leo no está - digo y le invito a tomar asiento - Te apetece un café? Jugo?
- Si un jugo está bien!... Y hace mucho que salió?
- No sabría decirte Adan, apenas desperté hace unos minutos, desde que hora