Sus dedos se entrelazaron con los de Teo en un agarre firme. Los flashes estallaban a lo lejos. Las voces de periodistas y demás invitados llenaba el aire con una mezcla de gritos y risas. Avery y Stella aparecieron frente a ellos apenas dieron unos pasos, abriéndose paso entre la multitud para indicarles el camino y darles algunas instrucciones individuales.
Luego, Teo la guió hacia la alfombra roja. Esperaron a un lado hasta que uno de los encargados del evento les diera la señal para avanzar.
—Es su turno —dijo una mujer y les hizo un gesto con la mano.
Caminaron hasta detenerse frente al panel cubierto con los logotipos del evento, bajo el resplandor de las cámaras.
Teo deslizó una mano por la cintura de Hannah, y ella apoyó una en su pecho. Él giró el rostro hacia ella con una sonrisa, observándola como si nadie más existiera en el lugar. No fue difícil hacerlo. Era fascinante verla enfrentarse a las cámaras con una expresión serena y segura; atrás había quedado el nerviosism