En ese momento, en la entrada de la Mansión Stormy.
Varios coches llenos de balazos y emitiendo humo negro se detuvieron con un rugido. Las puertas se abrieron y Estrella, junto con Josué y otros, salieron rápidamente.
—Srta. Estrella, ¿estás bien? ¿No estás herida? —Josué preguntó, todavía con el susto en el cuerpo.
Durante la reciente emboscada, llovieron balas y el coche recibió innumerables impactos.
—Estoy bien, pero hay que ir enseguida a ayudar a Pedro —instó Estrella.
—Claro... —Josué reaccionó de inmediato y comenzó a dar órdenes—: ¡Rápido! ¡Llamen a todos los miembros de la Pandilla Kirin! ¡Armen a todos y vayan a apoyar al Sr. Pedro!
—¡Entendido! —un subordinado respondió y se apresuró a convocar a la gente.
Pronto, una multitud de miembros de la Pandilla Kirin salió en tropel hacia la Sierra Esmeralda.
—Srta. Estrella, el Sr. Pedro es muy fuerte y tiene mucho apoyo, seguramente estará bien. Por favor, pasa al interior y descansa un momento —Josué, secándose el sudor, conduj