Punto de vista de Serena
En cuanto conecté mi teléfono, sentí un alivio. El familiar tono al encenderse resultó reconfortante. La pantalla se iluminó y las notificaciones comenzaron a llegar en cascada.
Mensajes de texto, llamadas perdidas, correos electrónicos y alertas de aplicaciones, llegaron todos a la vez. Era abrumador, pero mi teléfono seguía vibrando, recordándome cuánto me había perdido.
Mi dedo se detuvo sobre las notificaciones, pero dudé. Mi corazón latía un poco más rápido y no podía animarme a tocarlas todavía.
En su lugar, respiré hondo, mirando fijamente la pantalla, donde las palabras "desfile de moda" destacaban entre la avalancha de mensajes. Decidí ocuparme primero de los asuntos urgentes, el resto podía esperar.
Finalmente, reuní el valor y abrí el correo de Stevie con el asunto "Fotos del Desfile de Moda". Su mensaje decía: "¡¡¡Chica!!! No puedo creer lo bien que salieron estas fotos."
Toqué los archivos adjuntos y solté un pequeño jadeo. Las fotos eran impresion