Capitulo 23.
Toqué la puerta tres veces antes de entrar al despacho y una vez adentro, el hombre ni se digno en levantar la vista para mirarme, la mantuvo pegada a la computadora, como siempre.
Dejé la taza sobre el escritorio y lo único que dijo fué "gracias" así que me dispuse a irme sin mencionar palabra.
-¿A dónde vas?
Me frené en seco, pero me mantuve de espaldas a él.
-Veo que estás muy ocupado así que mejor te dejo solo para que trabajes tranquilo.
Todo quedó en silencio y segundos después, escuché cuando se levantó de su asiento y supe que vendría hasta mí.
Inhale y exhale profundamente para calmarme, y trate de dejar mi cara inexpresiva antes de darme la vuelta porque era obvio que me lo encontraría de frente.
-¿Que sucede?-Su expresión era sería, y me veía como si intentara leer algo en mis ojos.
-Nada.
-Stella...-Pronuncio mi nombre de forma distinta, y se paso la mano por el cabello, he notado que lo hace cuando está frustrado o molesto, pero no tiene razón para estarlo, aquí la que es