CAPÍTULO 26. La muerdes tú o la muerdo yo
CAPÍTULO 26. La muerdes tú o la muerdo yo
Scott respiró profundamente tratando de evaluar la situación con calma. Para empezar no estaba en una relación de verdad con Alexa, para seguir era viernes y la cocinera tenía noche libre así que no habría empleados en la casa que pudieran delatar que tenía una amante en las narices de su esposa... especialmente a migración, que era lo único que le preocupaba.
La loca no era su esposa de verdad, así que no tenía que rendirle cuentas, y al parecer era lo bastante inteligente como para salir del camino cuando hacía falta así que se giró hacia la rubia y respiró profundo.
—¿Y esa quién era, Scott? —preguntó Ailett.
—No debes preocuparte por eso —replicó él—. No es nadie importante. Ven aquí y déjame invitarte a entrar; creo que estamos a punto de tener una muy larga e interesante noche juntos.
Entraron en la mansión y Scott la llevó a la terraza antes de pedir cena a uno de sus restaurantes favoritos. Decidió pasar un buen rato y al parecer Ailet