PEQUEÑA AMADA MÍA: CAPÍTULO 26: Tentaciones azucaradas
Niko seguía aferrado a la pierna de Gigi, haciendo todo un espectáculo mientras seguía devorando aquel pastelito en medio de mil pucheros y llenándose la cara de azúcar glaseada.
—¡Niko, por favor! —Gigi apenas podía hablar de lo mucho que se re