Simona y Mariano se marcharon después de un rato.
Leo acababa de salir del área estéril hoy y no podía dejar el hospital todavía. Ximena sugirió quedarse para acompañarlo. La responsabilidad de cuidar a Liliana y Nicolás recayó nuevamente en Alejandro.
Después de que él se fue, Ximena encontró al médico tratante de Leo para preguntarle:
—Doctor, me preguntaba si puedo llevar al niño a dar un paseo afuera.
El médico respondió:
—Se está recuperando muy bien, no debería haber ningún problema en salir, pero sería mejor llevar a un médico.
Ximena se sintió aliviada.
—Está bien, ¿entonces podrá salir del hospital mañana?
—Sería mejor llevarlo a casa para el Año Nuevo— dijo el médico con una sonrisa. —Después de todo, ha estado solo en el área estéril durante un mes.
Ximena agradeció:
—Gracias.
—Es lo menos que puedo hacer.
De vuelta en la habitación, Ximena miró a Leo, quien ya estaba dormido. Se acercó a la cama y se sentó suavemente.
Luego, extendió la mano y acarició suavemente la car