CAPÍTULO 57
SIENNA
Algo extraño dentro de mí se aprieta al ver esa escena tan... tan... erótica. No puedo apartar los ojos de los tres que se mueven como si fueran uno solo. Nat juega con el interior de Ava, Messi baja su vestido, sacándole un seno y se lo ofrece a Nat, quien se lo lleva a la boca y lo amamanta. Messi la vuelve a besar, tragándose su gemido. Entonces, Natasha se levanta y se arrodilla entre las piernas de Ava, quitándole las bragas. Las deja a un lado y le abre bien las piernas, mirando el coño de mi amiga y luego su cara embriagada de placer.
—Tan jodidamente hermosa y perfecta. Y toda nuestra —dice Nat, acercándose y enterrando su cara entre sus piernas, comiéndole el coño.
—Maldición, eso es caliente, Nat. Si tan solo... olvídalo —Messi se corta y vuelve a besar a Ava, pero ella se separa y los mira a ambos.
—¿No podrían hacer una excepción, por mí? —Messi y Nat se miran.
—Mierda, más te vale que sea bueno —le dice Nat a Messi. Él sonríe de emoción, inclinándose