Capítulo 43. Una noche a solas.
Vicenzo Toussaint.
Entramos en la habitación y sin esperar a encender la luz, tomo de la mano a Steph y rudamente la aprieto contra la pared. Subo sus manos arriba de su cabeza, la inmovilizo con mis caderas y nuevamente estrello mi boca caliente contra la suya.
Introduzco mi lengua, masajeando la suya. Muerdo su labio inferior suavemente y Steph me responde con un exquisito gemido. Beso su quijada y bajo a su cuello. Se lo muerdo juguetonamente, sin liberarle las manos ni alejarme de ella. Lo chupo y lo beso. Su respiración es agitada y una serie de gemidos abandonan sus labios.
Me encanta sentirla mía. Amo tenerla toda para mí y deseosa por complacer y ser complacida.
Libero sus manos y le quito el abrigo. Rompo el vestido que estaba trayendo, dejándola solo en ropa interior.
Ella me quita rudamente mi abrigo y también rompe todos los botones de mi camisa, dejando mi pecho expuesto. Rápidamente desabotono mi pantalón y me desnudo.
Giro a Steph, dejando su cara y sus manos contra la