Capítulo 14. ¿Embarazada? No creo
[CONTINUACIÓN]
—Es aquí, si quieres te dejo sola y…
Negué, abrí mis ojos tan solo un poco y las afectadas y el vértigo que sentía se hicieron insoportables. La tomé de la mano y cayendo de rodillas al piso, comencé a vomitar.
La chica de cabello oscuro y ojos avellana, me sostuvo en cabello y espero a que terminara, pero era horrible. Si dejaba de vomitar, el mismo olor y la opresión en mi garganta me volvía a producir náuseas.
—¿Mejor?.
¡No!
—Sí. —mentí. Para nadie era cómodo estar viendo a otra persona vomitar y peor si era una completa desconocida.
Me levanté a como pude, lavé mis manos y enjuagué mi boca y con su ayuda logré salir caminando de aquel diminuto cubículo.
—¿Segura que estás bien? —inquirió nuevamente. Asentí y ella no preguntó más.
—Gracias por ayudarme. —sonrió, regresando a su lugar de trabajo. —en realidad solo venía por un par de vasos desechables y un paquete de Pringles.
—¿Pringles? Creo que ya no hay.
Aún podía correr y evitar que Christian se comiera todo el