Narrado por Fatima Hneidi:
Llegué a la mansión con las ideas claras del motivo por el que vine.
Me sentía segura. Me sentía dispuesta a absolutamente todo con tal de cumplir mi propósito.
He cruzado el umbral con la frente en alto, con el corazón latiendo como un tambor de guerra. No soy Gonul. No soy una impostora. Soy Fatima Hneidi, y he venido a reclamar lo que me pertenece: mi nombre, mi historia, mi libertad.
Hablé con mi madre, y a pesar de que nunca ha sido una buena madre para mí, me preocupa el estado tan deplorable en el que se encuentra. Me gustaría ayudarla a que no tuviera que vivir en la red de abuso y maltrato en la que vive. Apoyo a mujeres en situaciones similares a la suya, de eso se trataba mi trabajo, por ende me pesa que mi madre esté en ese estado y simplemente dejarlo pasar porque no quiero más enfrentamientos con mi padre. Quiero soltar, quiero ser feliz. Y mientras él me persiga, sé que siempre será un sueño imposible.
Quiero tener éxito en lo que he venid