~{Deseo que me mires como yo te miro}~
—Es algo que no te puedo decir.
Thom se rió entre dientes —. ¿Crees que si me lo dices ya no se cumplirá?
—No lo sé. Estoy segura que una estrella aparecerá hoy, no quiero perder la oportunidad —respondió seria, y volvió a alzar los ojos al firmamento.
Él se quedó mirándola. Esa mujer es un enigma, uno que lo pone nervioso cada que la tiene a su lado, desde la primera vez que la vió, cuando no quiso soltar su mano.
Quería ignorarla y mantenerse lejos, muy lejos. Sin embargo no entiende porqué está tan empecinado en aquello.
¿Qué ha hecho Camile para que no quiera derribar ese muro invisible?
—¡Te lo dije! —chilló emocionada ante la estrella fugaz que repentinamente cruzó el cielo.
Cerró sus ojos y juntó sus manos en el centro de su pecho.
~{Si Thomas es el indicado para mí, deseo que estemos juntos}~
Thom, cuál niño pequeño, imitó la acción. Sin cerrar los ojos murmuró para sí mismo:
—Deseo volver a sonreír.
Dos almas deseando amor. Una q