Thomas
¡¿Qué estoy haciendo?!
Acabo de besar a Camille y huí como un pavo despavorido.
Estoy seguro que el alcohol corriendo por mis venas fue el que me gatilló a hacer aquello.
Pero, ¿Por qué?. ¿Por qué dejé que eso pasará?
Vuelvo a la mansión, tomo mi chaqueta y me despido de John y Luz. A pesar del desconcierto en sus rostros, les hago saber que estoy bien y que me marcho. Probablemente otro día visite a mi amigo.
Camino a mi vehículo arrastrando los pies, dejo que el aire frío se cuele por mis fosas nasales y me espabile. Sacudo mi cabeza y ahuyento a la consciencia que me grita que soy un estúpido, y por mucho que quiera rebatir, sé que tiene razón.
Soy un necio.
Me prometí a mi mismo que no volvería a fijar mis ojos en otra mujer, mi corazón siempre le pertenecería a ella, a mi amada Evelyn. A la castaña que me enamoró con su sencillez y bondad.
El día que mi esposa murió llovía torrencialmente. Salía de una cirugía y me percate de las nu