𝓣𝓻𝓪𝓲𝓭𝓸𝓻

Nuevamente miraba para todos lados sin tener un rumbo definido. Mi impotencia era tanta que ya me daba lo mismo qué hacer o dónde ir.

Mientras lloraba y estilaba por la lluvia, la gente empezó a mirarme y sacar fotografías. Me volví loca, gritándoles que, por favor, se detuvieran y me dejaran tranquila.

—¡Tienen que parar! ¡Déjenme tranquila, por favor! —grité.

Nadie me escuchaba ni hacía caso, al contrario, mientras más les gritaba más gente llegaba a ver el circo.

Me sentí ahogada, así que salí corriendo sin rumbo y sin pensar en las consecuencias que eso podría traerme.

Cuando ya logré divisar que nadie me seguía con su teléfono o cámara, recordé que andaba con guardaespaldas, pero al mirar para todos lados me di cuenta que también lo había perdido.

¿Qué diablos se suponía que tenía que hacer? Mi cartera la llevaba él por precaución. En ella tenía todo: dinero, teléfono, documentos.

Nuevamente observé a mi alrededor, muy desorientada. No sabía para dónde estaba caminando ni cómo sa
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App