BRAD ULIBARRI
Me estresa ver a una mujer llorar, no lo soporto. Lo mío es buscar soluciones rápidas y continuar desde ese punto. Lo sé, la delicadeza jamás fue ni será lo mío. ¿Fui brusco con mi cuñada? Si. ¿Dejó de llorar? Si. Mis métodos funcionan.
Mis abogados ya trabajan en el divorcio de mi cuñada. Hace tiempo que no tienen un caso complejo entre manos. Por otra parte, hay un investigador hurgando en el pasado del "afligido esposo" del año.
No puedo dar información de TENTACIONES y lo que allí sucedía, pero se que puedo conseguir a los colaboradores fieles que él más seleccionaba. Les daba dinero para tener sexo, pero yo puedo pagar más para obtener información.
Mi cuñada ya tiene su reputación manchada y las pruebas de infidelidad son más que aparentes y difundidas. No ocurrirá nada malo por soltar una bomba que demuestre que su esposo estuvo detrás de todos los engaños. No sé si fue tan canalla para planear un divorcio así, mucho menos si eso podría comprobarse, pero nad