NARRADORA

Gretta miró a los ojos de ese viejo desgraciado que solo buscaba liberarse de ella.

Un vampiro ancestral que actualmente era el más poderoso del Congreso.

—Sr. Wolfren, no voy a ningún sitio porque me están acusando de algo que no hice…

—¡¿Acaso niegas que interviniste en el valle sin consultar con el Congreso?! —el hombre la señaló con largas garras.

—. ¡Todos los negocios de tu familia serán confiscados hasta que no se determine tu inocencia en esto!

—Ja, eso ya lo veremos —la magia de Gretta fulguraba en sus dedos.

No se dejaría atrapar y menos extorsionar.

Wolfren había esperado mucho para encontrar una fisura por donde deshacerse de su competidora más peligrosa; no lo dejaría pasar.

Siseó sacando los colmillos y listo para darle una lección a Gretta.

Contaba con el apoyo de la mayoría de los ancianos; había hecho pactos secretos.

La bruja estaba tan metida estos años en el asunto de su hijito en coma que había descuidado sus viejas alianzas.

— ¡De esta no te podrás esca