Esa noche no fui al dormitorio de James y aunque no pude dormir muy bien, ya que Cristofer me abrazaba la cintura con su brazo para tranquilizarme por que se dio cuenta de que empecé a dar vueltas en la cama sin motivo, Hicimos el amor en la ducha y luego en nuestra cama, pero eso no me ayudo mucho a dejar de pensar en las palabras de James, ya que sabía que si que era capaz de hacer lo que me dijo, decirle a todos que fuimos amantes aunque en realidad, fue él, el que me drogo para aprovechar la ocasión de que me encontraba sola. Cansada de dar vueltas en la cama, me levanté muy temprano, me puse una bata mientras veía como dormía Cristofer, teniendo uno de sus brazos en su abdomen y el otro brazo encima de la almohada. Me marché aunque mi pensamiento era despertarlo y hacerle el amor, ya que estaba demasiado guapo y fuerte,me tenía muy enamorada.

Me fui directamente a la cocina para prepararme una taza de café, cuando me iba a sentar en la silla, vi entrar a James mirandome muy fur