Alfa Matteo
Me sentía muy cansado, había días en que no me apetecía comer. Al menos ya no tenía ese dolor en el cuerpo. Consulte con mis sanadores y hasta con las brujas, pero no encontraron el origen de mi malestar. Lo unico que obtuve fue una criptica frase de las brujas
"todo a su tiempo, hay que sanar el cuerpo primero, luego deberás ir a salvar la mente, esa es tu recompensa"
-Matteo creo que tenemos un problema-entraba Jake a mi oficina con su rostro preocupado.
-¿que pasa?-pregunte pensando en que nos estaban atacando o algo peor, por su expresión.
-se acabaron las papitas picantes en la cocina y Octavio, tu chef de pacotilla no quiere hacerme más-decía Jake y me dieron unas ganas de patearle el culo.
-por la diosa Jake, algun día te golpearé tanto que jamás volverás a hacer estas estúpidas bromas-dije sentandome una vez más.
-Matteo debes salir de está oficina, fuera de la casa, no a entrenar, no ha hacer rondas de patrullaje, sal de la manada ¿porque no vas a visitar a Morgan