67.
KAYNE
No podía ocultar la sonrisa de satisfacción al ver las caras del consejo mientras observaban "la perfecta cena" que mandé a elaborar especialmente para ellos.
Platos con toda clase de verduras, preparadas desde cocidas hasta en ensaladas de todo tipo.
Para ser lobos que suelen comer carne, demasiada, esto tiene que ser como ofrecer lombrices a una serpiente.
El personal de cocina se mantiene inquieto al fondo de la sala, dando miradas furtivas hacia las momias andantes que no saben si comenzar a comer o declinar.
Yo solo podía observarlos, sin importar ocultar la satisfacción que me da ver que esto no es de su agrado.
—Rey Alfa, debería haber otra clase de platos…
—Están los necesarios, los que necesitan. Tengo entendido que para lobos de… su edad, es necesario mantener una comida balanceada entre la carne y los vegetales.
Un comentario que claramente les disgustó; sus rostros desencajados por la ira que tratan de reprimir lo dicen.
Comen el primer bocado y, con él, las ganas de