17.
KAYNE
Lo primero que vi cuando Alioth me regresó el control fue a ella entre mis brazos, durmiendo tranquilamente sobre mi pecho desnudo.
Acaricié su cabello, mirando las lágrimas secas que manchaban su rostro. Se veía hermosa, tranquila, sin que nada le afectara, pero yo sabía que no era así.
Algo más había sucedido; Alioth estaba por desatar una tormenta allá afuera y lo único que lo impedía era que ella estuviera en mis brazos.
«¿Qué fue lo que viste, Alioth?
«Alguien la lastimó de una forma cruel, de la misma forma que lo haré yo cuando le ponga mis garras encima. Tres garras marcando su rostro, se veían rojas, demasiado mal, hechas con mucho odio, pero pobre de quien lo hizo».
Ella tembló, sintiendo el fuerte dominio de Alioth, uno que se calmó en un segundo cuando se dio cuenta de que podíamos lastimarla.
Más allá de ella, pude notar un dibujo. Tomé el cuaderno, observándolo; era mi Lycan, en medio de un bosque con la luna llena sobre él.
Supongo que esa fue la noche en que él l