Lorand
El bullicio es horrendo, el griterío sumado a las risas junto a vitoreos me jode más el sueño y el ánimo
Me pongo una camisa sin abotonar encima y salgo con arma en mano harto de esta situación.
A lo lejos se ve a todos celebrar ridiculeces con botellas que levanta para beber como cantina de pueblo del siglo pasado. Suelto el primer tiro que rompe la botella que sostiene uno de ellos, todos se ponen en alerta, su gente levanta las armas y la mía se pone a la par dispuestos a disparar y desmembrar a quien suelte la siguiente bala
__ Se lo pedí por las buenas - escupo enojado - Se lo repetí una segunda vez y no lo entendieron, la tercera fue a esa botella pero la cuarta va sus pelotas
Ileana y otras mujeres no quitan los ojos de mi abdomen con la boca abierta, me importa poco que se creen ideas en la cabeza en este momento
Velkan pide que bajen las armas siendo quien se posa frente a mí buscando que no se convierta en una carnicería la m****a que organizó
__ Solo es una reun