Después de saber que fue Bryan quien la salvó, Natalie comprendió muchos detalles.
Xico asintió, —Estuvo tres días en coma y cuando despertó, le han atendido en el primer hospital. Cuando me encontré con usted en el hospital, le pregunté si quería que supiera lo de su hospitalización y no me dejó decirle nada.
Natalie se sintió culpable y sus ojos enrojecieron.
—Estos seis meses ha estado sufriendo, ¿verdad?
Curó a un paciente que tenía un hematoma que le oprimía un nervio y el dolor era tan agudo que se golpeaba la cabeza contra la pared para aliviarse.
Si lo hubiera sabido, le habría operado hace seis meses y no habría sufrido dolor durante tanto tiempo.
Xico guardó silencio un rato y susurró: —No sólo ha sufrido el dolor, desde el inicio pudo rodar con analgésicos, luego ningún analgésico le hizo efecto y todos los días tenía que estar vigilado por dos personas para evitar que se golpeara la cabeza contra la pared cuando le dolía demasiado.
Natalie respiró hondo y dijo despacio: —¿P