Nadie sabía cuándo se despertaría la anciana.
Rebeca esperó con los demás en el hospital durante más de una hora, al ver que la anciana aún no se había despertado, Sara le dijo a Rebeca con voz débil: —Puedes volver primero, cuando despierte, o si hay alguna otra novedad, te avisaré.
Rebeca miró a Esperanza, que llevaba un respirador y estaba tumbada en la cama del hospital, y miró su celular antes de decir: —Todavía es pronto, me quedaré un poco más.
Al oírla decir eso, Sara no dijo nada.
Lidia e Iván tampoco se fueron.
Rebeca esperó hasta cerca de las once de la noche. Después de oír decir al médico que la anciana se estaba estabilizando un poco, pero que no iba a despertarse tan pronto, se fue a descansar primero.
Logan y Carolina llegaron al hospital una hora después de que Rebeca se fuera.
Logan ya sabía que Rebeca había visitado a la anciana.
Tanto él como Sara decidieron quedarse con Esperanza y dejar que el mayordomo se llevara a Carolina a descansar.
Desde que la niña podía re