Carolina también se acercó, vio a Logan y dijo: —¡Eh, es papá! Mamá, deja entrar a papá.
Rebeca bajó los ojos: —Sí.
Los demás habían oído la conversación de Rebeca y Carolina.
Todos se sorprendieron un poco al saber que Logan estaba aquí, pero, estando Carolina allí, no le preguntaron a Rebeca por qué venía.
Unos instantes después, llegó Logan.
Rebeca salió a su encuentro y le preguntó: —¿Vienes a llevar a mi abuela al hospital?
Logan: —Sí.
Rebeca asintió y dijo: —Espera un momento.
Logan contestó: —Vale.
Y no se bajó del auto.
Pasaron más de diez minutos hasta que Úrsula salió de casa.
Al ver esto, Logan salió del carro y le abrió la puerta.
Carolina se estaba preparando para ir al colegio y le dijo a Logan: —Adiós, papá.
—Adiós.
Él asintió y saludó a Rebeca y al resto de la familia Estrella antes de subir al carro y marcharse.
Rebeca llevó a Carolina al colegio.
A las once y media, Rebeca estaba ocupada en la oficina cuando llegó la llamada de Úrsula: —La operación ha sido un éxito.