Capítulo 49; Necesidad de distracción.

Dos días habían transcurrido desde su regreso de Santorini, dos días en los que se sentía cada vez más miserable, había llamado a Sebàstian una vez, pero al notar que él no respondía, se obligó a desistir, no valía la pena intentar llamarlo, era obvio que él no respondería y se obligaba a sí misma a no someterse a ese daño.

Aquél día ocurrió lo que no esperaba, su celular timbró... era John.

Hubiese esperado que él no deseara hablar más con ella y de ser así, no podría haberlo culpado jamás.

—Hola, John...

—Hola... ¿Cómo estás?

—Bien, bien—mintió, incapaz de explicarle lo que sucedía, por dos grandes motivos; el primero, no era justo con John hablarle sobre Sebàstian, y segundo, no creía capaz de hablarlo sin llorar. —¿Y tú?

—Bien... yo... estaba llamando porque me gustaría hablar contigo, Gilliam, pero quisiera hacerlo en persona.— "Gilliam", era obvio que John se estaba esforzando por mantener la distancia emocional.

—De acuerdo... ¿Vienes a casa, o voy a la tuya?

—Hoy no me es
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo