Capítulo 86 — Visita a la señora Smith
Los primeros días estuvieron dedicados a desempacar, organizar habitaciones y acomodarse a la vida en el campo. Charlotte corría de un lado a otro con una energía inagotable, descubriendo jardines, corredores y vistas maravillosas desde las ventanas más altas. Virginia, por su parte, disfrutaba del silencio de las mañanas y de la comodidad de sentirse nuevamente en una residencia que se sentía cercana al hogar.
Pero había algo pendiente. Algo muy importante.
— ¿Estás lista? —preguntó Charlotte aquella mañana mientras ajustaba sus guantes blancos.
— Por supuesto —respondió Virginia—. Hace semanas que no vemos a Clara. Estoy ansiosa por saber cómo está.
Charlotte asintió con entusiasmo.
— Y yo. ¡Ni siquiera envió una carta en tanto tiempo! Aunque supongo que adaptarse a una nueva vida debe ser… complicado.
Virginia sonrió. Sabía que Charlotte, aunque siempre alegre, llevaba una preocupación constante por Clara desde que había dejado la residencia D