La acción de Joana sorprendió a todos los espectadores que se detuvieron a mirar, después de todo, ella aún sostenía a su nieto en brazos. Actuar de esta manera, sin importarle nada, hizo que todos sintieran preocupación por ella.
El niño parecía tener un futuro prometedor en cuanto a fuerza, ya que ni siquiera lloró en medio de semejantes gritos, simplemente parecía molesto.
Mientras tanto, Sofía, que estaba parada a un lado, no hizo ningún intento de detener a su madre y simplemente disfrutaba de la situación.
Al ver esto, Teo rápidamente me sacó de allí y gritó furiosamente: —¡A ver si os atrevéis vosotras dos!
Su grito aterrador realmente asustó a madre e hija. Joana detuvo sus pasos de inmediato, sosteniendo al niño en un brazo y manteniendo la otra mano en una posición de arañar.
Alguien que estaba observando la escena comentó: —¡Realmente está loca! ¡Está teniendo un ataque de ira mientras carga al bebé!
—¿Las amantes son tan atrevidas en estos días?
—Por lo que veo, estas dos c