Capítulo 82. Máscaras rotas.

Pov Héctor:

No me gusta desconfiar de la gente porque sí. En la manada aprendí que vivir en paranoia constante solo te desgasta, y al final ves enemigos hasta en las sombras de tu propia cama. Pero con Martín… desde el primer momento hubo algo que no me cuadró. Demasiado perfecto, demasiado correcto, demasiado oportuno. Y Aylin, con la guardia baja por todo lo que le está pasando, se lo traga entero.

Alaric no lo admite en voz alta, pero yo sé que piensa lo mismo. Lo noto en cómo aprieta los puños cada vez que lo ve acercarse a ella. Yo, en cambio, no tengo ese lazo sentimental atravesándome el pecho, así que lo miro con más frialdad. Y cuanto más lo observo, más me convenzo de que ese tipo no es lo que aparenta.

Esta noche decidí dejar de especular. No sirve de nada dar vueltas si no hay pruebas. Así que lo seguí.

Me moví con calma, sin hacer ruido, mezclándome con la multitud de la ciudad hasta que lo vi salir del hospital. No iba hacia su casa. No iba h