Las cosas se demuestran con hechos, Reiko. Me decía mientras caminaba de un lado a otro de mi apartamento.
Desvié la mirada hacia el bolso que estaba preparado sobre el sofá, el bolso con el cuál iba partir una nueva vida junto a Deva. Quité la vista sobre él rápidamente por que no podía permitir que la angustia viniera otra vez a mí.
Había pasado ya 3 días desde el robo del prototipo, y yo seguía urdiendo mi plan para recuperarlo y sacar del camino al molesto Uzui.
Estaba decidido a comenzar con las acciones necesarias para cumplir con mi objetivo final: estar junto a Deva. Sin embargo, ahora tenía dos obstáculos que me impedían alcanzarlo; uno, tal parecía que el prototipo se había esfumado de la faz de la tierra, y dos Deva no quería saber nada de mí. Sin duda era un escenario bastante negativo.
Pero debía ir paso a paso, si quería lograr algo definitivo. Primero tenía que encargarme del prototipo y de Uzui, luego ya lo haría de Deva.
Con todas mis dudas me levanté y caminé hacia l