A la mañana siguiente, Alessia salió con el pretexto de ir con una amiga a desayunar y, no podía cancelar la reunión.
Massimo se quedó hasta más tarde en la cama, era la primera vez en años que podía darse ese lujo.
Leonardo se levantó y buscó a Massimo, pero no logró localizarlo en la mansión.
- Emma ¿Has visto a Massimo? - preguntó el hombre, aun buscando a su hijo.
- Ayer salió y aún no ha vuelto. - Respondió Emma educadamente.
- Emma dime algo, ¿Cómo fue la relación de mi hijo con Guadalupe?
- Señor, ¡Pienso que nunca fue buena! La señora se casó muy joven y el señor se aprovechó de ello. - dijo Emma molesta y con toda la sinceridad que encontró en ese momento.
Emma soltó lo visto sin tapujos, ella llevaba años trabajando para los Pellegrini y existía confianza, por lo que al ver a Leonardo decidió contar la historia.
Leonardo se quedó atónito al escuchar por todas las penas que hizo su hijo pasar a la chica.
Llegó a la conclusión de que su hijo era un monstruo.
Definitivamente, l