Capitulo 32. Muriéndose
La pelinegra niega sintiendo que las piernas le temblaban.
—¿Usted mato a esa chica?
—Si. Me tuve que deshacer de esa humana porque el padre de Dimitri no deseaba desposar a una loba elegida para él, era fácil, abandonar a la humana y tomar a la loba elegida por el consejo. Una mujer de verdad, una que si le dio un hijo.
—Usted arruino el amor del padre de Dimitri, y ahora quiere destrozar el de su hijo.
—¡Así es! Si no te largas, me veré obligado a deshacerme de ti también. Contigo fuera del juego, Dimitri tomara a mi hija como esposa y todo marchara bien para nosotros.
—Dimitri no ama a su hija, me ama a mí.
—Eso ya lo sé, pero contigo muerta, ya no tendrá más remedio que casarse con Tania y tener cachorros con ella.
—Ha perdido la cabeza.
Lester niega mientras avanza hacia ella lentamente.
—Solo hago lo correcto para mi manada, y esto es lo mejor. Así que decide Amy Grey, o te regresar a tu país o de este bosque no sales viva —Amy ensancha la mirada.
—Si me mata, Dimitri hará lo mi