65: De ahora en adelante.
Kenneth.
En el momento en que me di cuenta que ella no iría al restaurante, la desolación me invadió. La desesperación me consumió. Necesitaba decirle al menos gran parte de la verdad, pero con un mensaje no era suficiente para mí, por eso llegué a su departamento, y ahora, con ambos llorando mientras nos abrazamos, sé que he hecho lo correcto.
Volver a tenerla así de cerca es como si mi desierto en plena sequía recibiera una pequeña descarga de agua del cielo; llenándome de esperanza.
Termino de adentrarme con ella abrazada a mi pecho, pero antes de que caminemos al sofá, ella respira y se separa.
—¿Podrías darme un momento?
Asiento. No quiero abrumarla demasiado con todo esto. Aquella noche con su decisión de dejar todo por mí me comprobó que me amaba, y yo le rompí el corazón, así que sé que no es fácil procesar todo esto.
La veo irse hacia lo que parece ser el baño, pero también me doy cuenta de que ella está vestida para salir. Y como este espacio es prácticamente abierto, puedo v