-Promételo- insiste Cristal una vez más negándose a dejar ese calor que siempre lograba reconfortarla
-te prometo por la diosa luna que volveré y estaré presente para darles la bienvenida a nuestros hijos- asegura Dan sin dejar de mirarla a los ojos
-otra vez- insiste como si fuera una niña pequeña y no la soberana de un poderoso Imperio
-Cristal amor mío pero es la cuarta vez que lo digo- sonríe el alfa, su esposa le parecía tan adorable en momentos como estos que le era imposible no ceder a sus peticiones
-no me importa, en primer lugar deberías estar a mi lado y no estar haciendo promesas que
-no seas egoísta
-he pasado mi vida entera viviendo para los demás ¿Qué tiene de malo querer algo para mí?-cuestiona Cristal aferrándose con fuerza a su brazo
-no tiene nada de malo pero recuerda que lo hago por ellos- afirma acariciando su vientre, mientras la besa en señal de despedida- ¿crees que deseo separarme de ustedes? volveré, no me mires así… volveré con vida lo prometo
Ase