Realmente la empresa no está en problemas, pero este artículo muestra una verdad distorsionada. El viejo señor Miena sólo quiere su tajada de la empresa, por lo que no necesita que su reputación y acciones caigan en picada. Ingenuamente creia que Archer no había pasado por momentos difíciles o que requirieran un poco de ingenio para socavar una situación de emergencia, y aunque sabía que eventualmente se iba a dar cuenta, no esperaba que lo entendiera todo por instinto y finalmente lo descubriera cuando apenas acaba de empezar. Ni como negar que el joven que está frente a él es su nieto, no puede estar más que orgulloso por como es capaz de lograr grandes cosas a pesar de ser tan joven.
—Todo lo que diré será hipotético. —Advierte Archer mientras se pone de pie para acercarse a su abuelo paterno y sentarse a su lado en la otra silla —. Un joven hereda una importante empresa, y aunque puede pasar la responsabilidad a alguien con mucha más preparación y madurez, decide tomar el mando y