—Gracias señorita. —Digo en voz alta y me dirijo a Theo en tono bajo para decirle: —. Si en cinco minutos no he entrado a mi oficina, dile a Gio que estará en serios problemas.

—Sí joven amo. —Sonríe tenso mientras escribe un mensaje de texto, en cuanto recibe la respuesta me muestra su celular.

“Ya lo recibo, Joven amo. ¿Qué le pareció la chica nueva?”

Decido sacar mi Tablet para seguir leyendo los documentos, encontrando más detalles un tanto sospechosos en algunos contratos y tratando de entender las circunstancias. No solo me doy cuenta de lo que pasa con las acciones, sino que tambien hay detalles en algunos contratos que no tienen ni pies ni cabeza. Mientras más los veo más me confundo, pues no logro entender que es lo que pasa.

El teléfono fijo suena para darle la nueva orden a la mujer, y se acerca a nosotros con una sonrisa tensa.

—El señor Gio los recibirá en este momento. —Se hace a un lado mientras extiende su mano en dire