OMNISCIENTE
El excéntrico descapotable se detiene en la puerta de una boutique vip que viste a damas de la alta sociedad. Sebastián baja del asiento del conductor y se prende el único botón de su esmoquin negro que está confeccionado a la medida, resaltando su perfecta musculatura. Rodea el vehículo de lujo, para abrir la puerta del copiloto e extiende su mano para que la tome, Catalina al bajar. La joven mira las vidrieras frente a ella y observa los llamativos escaparates con maniquíes luciendo ropas de diseños exclusivos. Alza su mirada a su amado sin soltar su mano e inquiere con duda.
–Seba ¿Que hacemos acá?
El atractivo hombre hala la mano de la joven y pega su cuerpo así pecho, luego se inclina hasta su estatura y besa su frente, baja sus labios hasta tocar los de ella y entre besos le confiesa.
–Vamos a prepararte, para darte el lugar que mereces a mí lado, cómo mí mujer, mí amada y la dueña de mí corazón. Esta noche te proclamare cómo la única dueña de mí vida.
Los jóvenes se