Miré a Tom, confundido, sin tener idea de lo que estaban hablando. Antes de que pudiera decir nada, Lorraine me tomó del brazo.
- Ven, quiero mostrarte algo. - ella dijo. - Estamos de vuelta, chicos.
Dejé que me guiara rápidamente, llevándome al baño.
- ¿Qué estamos haciendo aquí? pregunté riéndome de ella.
- Te traje aquí para que te des cuenta de que necesitas despertar.
La miré sin estar seguro de lo que estaba diciendo.
- Llevas un año con él...
- No entiendo, Lorena.
- Tom es un buen tipo. Tienes que deshacerte de Nicolás para siempre.
- Ya me he deshecho de él.
- No... No lo sabes.
- Ya no pienso en él todo el tiempo. Tengo tiempo para otras cosas. - Admití.
- Olvidé decirle a Felipe que Tom no era Nicolás. De todos modos... ¿Tom se dará cuenta?
- Tom nunca preguntó sobre mi pasado. Mucho menos de lo que pasó con mi ex. Ni siquiera estoy seguro de que reconociera a Nicolás la noche que me dejó.
- ¿Por qué no me buscaste más? – cargó ella.
- Estoy... Haciendo muchas cosas.
- ¿Lo