Tengo un fuerte dolor de cabeza. Intento mover el brazo derecho, pero este no me responde. Agitado abro los ojos y lo primero que veo son los ojos color esmeralda de Eric. Me sonríe y me quita el cabello de la frente. Desorientada miro a mi lado, veo a Alec, con una transfusión de sangre en proceso. Pequeños fragmentos de lo que paso hace unas horas llegab a mi mente.
—¿Él está bien? —le pregunto a Eric.
Me noto la boca seca y el cuerpo débil, a dolorido; como si me hubiesen pasado un camión por encima.
—Está bien. Renata dice que en unas horas despertara. —Me acerca un vaso a la boca—. Bebe.
Le hago caso. Una sustancia espesa y dulzona se desliza por mi garganta. Agradezco el frescor. La bebo toda y me asiento en la cama. Eric con cuidado de no lastimarme el brazo vendado, me acomoda la almohada.
—&ique