Llegaron al país a la madrugada, Joel y Julieta los esperaban.
Joel observa que bajan Melek y Giovanni, se desilusiona, pensó que Renato al final no viajó, pero luego lo ve asomarse y sonríe feliz.
- Renato, amigo - grita y sonriendo, corre a abrazarlo, en un abrazo fuerte por la emoción de tenerlo frente a él nuevamente, después de tanto tiempo.
Tres años sin verse, fue mucho tiempo, muchos momentos sin vivir, sin compartir juntos.
Se van a la casa de Joel y Julieta, que los esperaban con un gran desayuno, conversaban de la boda y de pronto Julieta, toma la mano de Joel y se levantan. Tenemos un pedido que hacerles a ustedes dos. ¿Serán nuestros padrinos de la boda? ¿verdad?
-Sí - afirman ellos.
- Aceptan también ser los padrinos de nuestro bebé.
-Sí - grita Melek y se levanta para abrazar y felicitar a su amiga ¿Por qué no me dijiste que le hubiera traído muchos regalos de Italia?
- Solo los queremos a ustedes, no a los regalos.
- Felicitaciones, amigo - Renato abraza a Joel muy fue