★ Nicolas
Sentía la nostalgia al encontrarme en mi antigua vivienda, observando detenidamente desde el balcón.
Hacía tanto tiempo que no pisaba estos suelos, que incluso había olvidado los exuberantes rosales y la algarabía de los perros correteando alegremente en el patio trasero.
Rememoré mi infancia, en la que mi terquedad infantil me llevaba a persuadir a mis padres para que me otorgaran la mejor habitación, aquella que ofreciera la vista más impresionante.
Originariamente, esa habitación estaba destinada a ser el dormitorio principal, pero siempre lograba obtener lo que quería desde temprana edad.
Me apoyé cómodamente en la barandilla del balcón, contemplando a Daysi 3 ir y venir con frenesí, persiguiendo alegremente a mi hija.
La noche había caído e incluso en medio de la oscuridad, parecía que a la pequeña no le importaba en absoluto, sumergida en su juego con la canina.
Una sonrisa iluminaba su rostro con un encanto indescriptible. De repente, detuvo su carrera y se arrojó sob